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Síntomas y tratamiento para el helicobacter pyroli

Qué es la helicobacter pylori

El helicobacter pylori es una bacteria que vive en el estómago y en el duodeno y que suele ir acompañada de síntomas digestivos además de por cansancio. Esta bacteria suele colonizarse en el estómago y su multiplicación, dada su gran capacidad de supervivencia, puede generar una infección e inflamación estomacal produciendo gastritis crónica. Pero, a veces, los síntomas no son tan intensos y se manifiesta solo en forma de malas digestiones o molestias gástricas.

El Helicobacter pylori además segrega la enzima ureasa que le ayuda a sobrevivir y a neutralizar los jugos gástricos mientras que aumenta la secreción de estos jugos y debilita la estructura de la mucosa gastroduodenal. Además, se adhiere al revestimiento de la mucosa dañándolo.

La bacteria puede ser la causante de numerosas molestias y enfermedades como úlceras gástricas, cansancio, malestar gástrico, inflamación del estómago, disbiosis intestinal, reflujo gastroesofágico o cáncer de estómago. Su tratamiento tradicional con antibióticos y Omeprazol es un fracaso terapéutico y además perjudica nuestra microbiota.

Como veis los efectos de esta bacteria son muchos y las consecuencias pueden ser muy graves, más si tenemos en cuenta que es una patología que se presenta principalmente en la infancia. Eso sí, dado que muchas personas pueden ser portadoras de la bacteria, pero no poseen síntomas, lo más recomendable es tratarla en caso de que se posean síntomas como el cansancio o las úlceras, que no nos dejen avanzar en el día a día.

Tratamiento helicobacter pylori

En este caso, los pasos a seguir deben ser:

1. Como siempre, lo primero de todo será aliviar el síntoma y terminar con el malestar. Para ello en Olaiz contamos con diferentes productos naturales que no modifican el ph del estómago: Repair rapid acid de GSE, Acid soothe de Enzymedica y Bianacid de Aboca

2. A continuación intentaremos evitar la resistencia bacteriana con antibióticos naturales a base de principio activo (como los antibióticos de síntesis) y sinergia de moléculas. El orégano de Oleocaps 2 de Pranarom inhibe el crecimiento del Helicobacter pylori y la actividad de la ureasa, al no formarse amoniaco. El propóleo como buen antibacteriano actúa antinflamatorio en la mucosa intestinal y ayuda al equilibrio de la flora intestinal. Y la semilla de pomelo es un antibiótico natural que inhibe el crecimiento de la bacteria.

3. En tercer lugar hay que buscar romper la biopelícula para eliminar la supervivencia del helicobacter pylori. La biopelícula aumenta la posibilidad de supervivencia de la bacteria y facilita su multiplicación y a veces los antibióticos no son suficientes. Las enzimas como Serra Gold de Enzymedica nos ayudarán a romper los biofilms y a despegarlos de las mucosas.

4. Después debemos reparar el tejido dañado y restablecer la microbiota. Lo podemos hacer con hongos como la melena de león, Mico leo de Hifas da terra.

5. En último lugar, buscaremos repoblar la flora intestinal que puede haber sido dañada por la bacteria o por los antibióticos naturales. Los probióticos (Lactibiane H-PY de Pileje) nos ayudarán a mantener nuestra flora en óptimas condiciones e inhibir el crecimiento del patógeno y su adhesión a las células gástricas.

Remedios caseros para tratar la helicobacter pylori

Además de los productos naturales, podemos acompañar al tratamiento del Helicobacter pylori con algunos remedios y alimentos que nos ayudarán a paliar la patología y los síntomas. Entre ellos, una buena dieta nos ayudará a luchar contra la bacteria:

  • Los alimentos con altas cantidades de betaina nos ayudarán a recuperar el pH gástrico. Entre los productos que más cantidad tienen están la remolacha, el trigo, el grano de centeno, la espinaca, el arroz integral o la quinoa.
  • Frutas que aporten enzimas digestivas: la piña, el mango, el aguacate o la papaya son algunas de ellas.
  • Alimentos ricos en omega 3 y en almidón resistente para modular la inflamación.
  • Tomar complementos de estragón, hinojo, menta, romero y eneldo en las comidas para ayudarnos a digerir los alimentos.
  • Aumentar el consumo de plantas e infusiones como el regaliz, la manzanilla, la ulmaria, malvavisco, hierbabuena, jengibre, orégano para la mucosidad estomacal.
  • Zumo de limón en ayunas para favorecer la correcta acidez del estómago. Es conveniente consumirlo con pajita para no dañar el esmalte.
  • Para evitar que se propague y se adhiera a las paredes es recomendable tomar regaliz, evitándolo las personas hipertensas
  • Dieta mediterránea-antiinflamatoria, rica en alimentos fermentados, ácidos grasos de gran calidad y en probióticos.

Además, es conveniente, que en caso de que tengamos esta bacteria, mantengamos ciertas rutinas como los horarios de las comidas, el cocinado a baja temperatura o cocido, realizar paseos tras la comida y la cena para no acostarse en plena digestión y siempre una buena higiene para evitar que la bacteria se transmita.

Información original basada en el conocimiento y experiencia real en la Farmacia

Jaime Sanza Olaizola, Farmacéutico real de farmacia Olaizola en San Sebastián.