Síguenos en nuestras redes
Teléfono de contacto

Cremas y otros tratamientos naturales para curar el herpes labial

El herpes labial o calentura es una infección viral muy frecuente y altamente contagiosa. Son pequeñas ampollas llenas de líquido que provocan a la persona que lo padece ardor, picazón y escozor en el labio o alrededor de él. Normalmente el herpes labial no suele durar más de en dos o tres semanas y tras su cura no deja cicatriz.

Lo más habitual en estos casos es tratar los síntomas y la propia infección de herpes labial con cremas, apósitos, bastoncillos o geles. En Olaiz, además de todos estos productos naturales para curar la calentura creemos que es importante ir al origen del problema para evitar las futuras apariciones del herpes.

Por otro lado, debemos tener en cuenta que el herpes labial es un virus latente, lo que significa que una vez contraído vive contigo, aunque no lo notes. Y es cuando estamos más débiles cuando se manifiesta ya que nuestras defensas están bajas.

Qué hacer cuando el herpes labial ya ha aparecido

En caso de que la calentura ya se note y/o se vea, para tratar los síntomas podemos recurrir a stics y cremas para el herpes labial, que ayudan a reducir y aliviar la picazón o escozor producido por el herpes.

Labairom de Pranarom: gel labial con aceites esenciales 100% puros como la onagra, jojoba, rosa mosqueta, menta, eucalipto o limón. Se debe aplicar con la aparición de los primeros síntomas y cada poco tiempo, hasta que se comience a notar la mejoría. Elimina la sensación de picor y escozor.

Erps one stick de GSE: pomada en stick a base de cera y triglicéridos, con extractos vegetales que ayudan a que los labios vuelvan a su condición fisiológica. Es importante para ver resultados que se aplique varias veces al día.

Para evitar que la infección se expanda o haya réplicas, cuando notemos su aparición, debemos consumir alimentos ricos en lisina (carnes como el pollo, el cerdo; pescados como el salmón o el atún; verduras como los puerros o el tomate; la soja; el tofú; las legumbres; o las semillas de calabaza o el pistacho) y añadir a la dieta complementos a base de L-Lisina como los comprimidos Erps one.

Tal y como hemos comentado antes, la aparición de la infección es síntoma de que tenemos las defensas bajas por lo que el siguiente paso para recuperarnos sería ir al origen del bajón inmunológico y subir las defensas. Para fortalecer nuestro sistema inmunitario podemos recurrir a complementos de equinácea, selenio, propóleo, omega, vitamina D3…

Una vez que termina el escozor y la infección deja de propagarse suele aparecer en el labio una costra o postilla que ayuda a cicatrizar la herida. Para acelerar la cicatrización debemos tener los labios bien hidratados y secos para lo que podemos aplicarnos cremas a base de propóleo y cicatrizantes naturales que nos van a favorecer la desaparición de la costra.

Por último, al tratarse de un virus latente, cuando sintamos que baja nuestro sistema inmune, si queremos evitar su reaparición es importante que tomemos defensas y evitemos los alimentos ricos en arginina como la soja, las lentejas, los lácteos, la carne roja, el cacao o chocolate… y bebidas como el té negro y verde, la cerveza o el café.

Precauciones para las personas con herpes labial

En caso de que sepamos que podemos padecer herpes labial podemos tomar una serie de medidas que nos ayudarán a que no se produzca o reproduzca. Estas medidas serían:

  • Tomar alimentos ricos en lisina como la coliflor, el brócoli, alubias, remolacha, patatas... Y si no,  podemos tomar suplementos de lisina.
  • Cambiar el cepillo de dientes tras la infección.
  • Mantener los labios secos para favorecer su cicatrización
  • Evitar compartir toallas, cacaos…
  • Evitar los besos cuando se tiene la infección.
  • No tocarse la herida.
  • Lavarse las manos con frecuencia, sobre todo después de tocar la herida (para limpiarla).
  • Evitar las situaciones de estrés o ansiedad.
  • Ayudarnos con aceites esenciales, como el de Niauli, la melisa o el de regaliz.

Recordad que el herpes labial es muy contagioso y que cuando se tienen ampollas lo es más. Debemos evitar compartir todo aquello que pueda transmitir la infección (pañuelos, toallas, cremas, sábanas, pintalabios...). Y cuidado porque al ser latente también se puede transmitir incluso si no se ha manifestado.

Información original basada en el conocimiento y experiencia real en la Farmacia

Jaime Sanza Olaizola, Farmacéutico real de farmacia Olaizola en San Sebastián.