
90 %
Para mantener y/o restablecer la flora vaginal como prevención o tratamiento de infecciones.
Contiene cepas de Lactobacillus plantarum P-17630 para evitar infecciones o prevenirlas y restablecer el PH vaginal. De uso via vaginal.
Después del tratamiento antibiótico de la vaginosis bacteriana (infección vaginal bacteriana), para el postratamiento: Introducir 1 cápsula profundamente en la vagina por la noche antes de acostarse durante 6 días.
Para mantener una microbiota vaginal normal en caso de infección vaginal recurrente: Introducir 1 cápsula vaginal/día en profundidad en la vagina por la noche antes de acostarse durante 6 días consecutivos. Si es necesario, el ciclo puede repetirse una vez al mes durante 2 meses consecutivos más.
Introducir la cápsula profundamente en la vagina, estando tumbada (en posición supina), por la noche antes de acostarse.
Uso en niños y adolescentes: No utilizar Intibiotics vaginal en niños y adolescentes menores de 18 años.
Las mujeres menstruantes deben iniciar el tratamiento inmediatamente después de la menstruación.
Principio activo: Lactobacillus plantarum P 17630. Cada cápsula vaginal contiene 100 000 000 unidades formadoras de colonias (UFC) de Lactobacillus plantarum P 17630.
Excipientes: p-hidroxibenzoato sódico de etilo (E-215), p-hidroxibenzoato sódico de propilo, triglicéridos de cadena media, sílice (Aerosil 300), gelatina, glicerol, dimetilpolisiloxano, dióxido de titanio (E-171), lactosa.
Para que nuestro cuerpo sea capaz de defenderse, es necesario que tanto la Microbiota vaginal como la intestinal estén en estado de eubiosis (en equilibrio). Las paredes vaginales, están pobladas por una población específica de bacterias que nos protegen de los agresores patógenos. En estado de equilibrio, la microbiota vaginal está compuesta principalmente de un tipo de lactobacilos, también conocidos como “lactobacilos de Döderlein”. Estos son los principales responsables de la acidez vaginal (entre 3,5 y 4,5). El de la vulva es ligeramente más alto (por encima de 5). Dentro de la microbiota bacteriana vaginal también hay Bifidobacterias que, junto con los lactobacilos, mantienen la homeostasis vaginal y a los microorganismos oportunistas a raya (como Cándida albicans, Gardnerella vaginalis ..)
Determinados comportamientos, como la ingesta excesiva de fármacos, azúcares y carbohidratos simples, períodos de gran estrés, provocan el debilitamiento de las defensas, y permiten que los microorganismos oportunistas puedan aumentar en el intestino y en las mucosas. Esto produce un estado de disbiosis, que favorece la aparición de infecciones vaginales (vaginosis bacteriana, cándidas, parásitos...). los principales factores suelen ser: Estrés, alimentación, cremas antibióticas, irrigaciones vaginales agresivas, espermicidas, anticonceptivos intrauterinos (DIU), relaciones sexuales sin protección (principal causa de infección).
Es imprescindible actuar desde las primeras señales con un protocolo de tratamiento generalizado que trate el problema teniendo en cuenta todos los aspectos relacionados, procurando siempre intentar ir al origen del problema. Reforzar las defensas y restablecer el equilibrio de la microbiota tanto intestinal como la vaginal.
En éste caso intibiotic vaginal actúa de manera preventiva y mantiene el equilibrio de la microbiota intestinal inhibiendo la proliferación de los patógenos responsables de las infecciones genito-urinarias. Contiene lactobacilus plantarum, uno de los principales colonizadores del intestino delgado, para recuperar el equilibrio fisiológico de la microbiota bacteriana intestinal. Especialmente indicada en caso de cistitis, uretritis recurrente y prevención de reincidencias de la cándida.