
Gastricumeel 50 comprimidos
Es un medicamento homeopático especialmente indicado para gastritis, ardor, dolor de estómago.
Para qué sirve gastricumeel:
- Gastritis: aguda y crónica, en todas las fases, con y sin hiperacidez.
- Síndrome gastrocardíaco
- Distensión abdominal con gases
- Dispepsia y pirosis
En general, 1 comprimido 3 veces al día, dejándolo disolver en la boca. En afecciones agudas, inicialmente 1 comprimido cada 15 minutos (durante 2 horas como máximo).
1 comprimido contiene: Argentum nitricum D6, Acidum arsenicosum D6 30 mg de cada; Pulsatilla D4, Nux vomica D4, Carbo vegetabilis D6, Antimonium crudum D6 60 mg de cada
Excipientes: estearato de magnesio, lactosa.
El estómago necesita esa acidez para desempeñar sus dos funciones principales:
-Función Digestiva: la lisozima de la saliva comienza a degradar la comida. Cuando la comida llega al estómago, la gastrina comienza el proceso de la digestión, produciendo Hcl, moco y liberando pepsinógeno (precursor de la pepsina). La pepsina junto con el ácido clorhídrico realizan la digestión de las proteínas. Y el Hcl a su vez libera el factor intrínseco que es el necesario para la absorción de la vitamina B12.
Cuando ya se ha hecho la digestión y el pH ya es suficientemente ácido, la secretina es la encargada de decirle a la gastrina que pare el proceso. Así, el ph deja de ser tan ácido y comienza la digestión de las grasas en el intestino.
Si no hay ácido, no hay factor intrínseco, por lo que no se asimilará la vitamina B12 y además no se podrán digerir las proteínas.
Por ello gracias a la función digestiva del estómago se producen:
• Los procesos de descomposición de los alimentos
• Digestión de las proteínas
• Absorción de nutrientes como la vitamina B12
-Función Esterilizadora: Destruye los microorganismos que llegan a través del tracto digestivo o respiratorio debido a su gran acidez. Es una función fundamental ya que nos defiende de los patógenos que respiramos e inhalamos.
Cuando se desequilibra todo el pH del estómago y se ven afectadas todas sus funciones, se genera lo que conocemos como Dispepsia: Malas digestiones, dolor y/o malestar, incomodidad, localizado a nivel del epigastrio. Todo esto genera: saturación postprandial (después de comer) y saciedad precoz, epigastralgias (dolor y acidez epigástrica), náuseas, eructos, hinchazón abdominal...
Si sufres muchas veces de acidez, el origen puede ser una hipoclorhidria. Aunque parezca una contradicción, el origen del ardor y acidez se debe casi siempre a una hipoclorhidria del estómago, es decir, a un déficit de acidez del estómago que se manifiesta en otras zonas (esófago, pecho, garganta…) como un exceso de acidez, una sensación de quemazón y ardor en la mucosa de la garganta.
El estómago al no tener suficiente acidez da una señal al cerebro para que produzca más ácido. Si el ácido que produce no genera suficiente acidez, seguirá dando señales de que necesita más ácido, con lo que se sigue liberando ácido clorhídrico hasta conseguir la acidez necesaria del estómago. Solo cuando se alcanza la acidez óptima es cuando se detiene la producción de ácido. Cuando hay exceso de producción de ácido clorhídrico, pero no de acidez, salen los jugos gástricos del estómago y ascienden a otras zonas de la mucosa de la garganta que no son tan ácidas produciendo la sintomatología de ardor, quemazón, acidez, reflujo, regurgitación…